Una multitud marchó por Carina Barros, la adolescente de 15 años asesinada en Buta Ranquil. Este femicidio es el séptimo en la provincia de Neuquén en lo que va del año y el cuarto en cinco años en el norte neuquino.
Una gran cantidad de personas marchó en la tarde de ayer en la capital neuquina para pedir justicia y exigir políticas públicas para prevenir femicidios. Este crimen conmocionó a toda la sociedad y provocó que miles de jóvenes realizaran la convocatoria a la marcha utilizando las redes sociales.
Esta movilización recorrió las dos manos de la Avenida Argentina y culminó con un acto frente al monumento a San Martín. Los participantes de la marcha, en su gran mayoría mujeres, pidieron más presencia del Estado y se declararon en contra de los recortes económicos en políticas de género.
El femicidio de Carina
En la marcha estuvo presente Flavia Currumil, la madre de Silvia Cabañares. La joven de 35 años fue víctima de un femicidio el pasado 26 de agosto y su cuerpo fue hallado en Balsa Las Perlas. Este hecho también causó una gran conmoción en la sociedad neuquina y generó un fuerte repudio por lo que una gran cantidad de mujeres salieron a las calles a pedir justicia.
El único detenido por el crimen de Carina es su exnovio, Maicol Ezequiel Tapia. El joven de 19 años de edad mantuvo una relación sentimental durante tres años con la víctima y tras la ruptura, se encargó de humillar y acosar a la chica. Una de las amigas de Carina aseguró: "la acosaba permanentemente: la amenazaba con que iba a pegarle a los chicos con los que hablara, se metía de prepo a su casa para verla y llegó a ejercer violencia física. Estaba obsesionado con ella. No la dejaba en paz".
Pese a la gravedad de la situación, no había denuncias de la víctima en contra de Tapia. Algunos allegados aseguraron que la joven intentaba procesar la situación y no se sentía lista para enfrentar una intervención judicial.
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